martes, 31 de mayo de 2016

Breve reseña de la historia del boxeo olímpico, presentado por la escuela cubana de boxeo.


Teofilo Stevenson considerado el mejor boxeador del boxeo
olímpico de la historia brindó grandes satisfacciones
a su País, Cuba.
Si existe un País con los créditos de presentar esta breve reseña sin lugar a dudas es cuba. Sus resultados en los eventos internacionales a partir de la década de los 70,  así lo demuestran. En la actualidad es el País más destacado en los eventos internacionales mundiales y olímpicos

Historia del boxeo olímpico

Olympic rings with white rims.svg             Boxeo en los Juegos Olímpicos
Saint Louis 1904 | Londres 1908 | Amberes 1920 | París 1924 | Amsterdam 1928 | Los Ángeles 1932 | Berlín 1936 | Londres 1948 | Helsinki 1952 | Melbourne 1956 | Roma 1960 | Tokio 1964 | México 1968 | Munich 1972 | Montreal 1976 | Moscú 1980 | Los Ángeles 1984 | Seúl 1988 | Barcelona 1992 | Atlanta 1996 | Sydney 2000 | Atenas 2004 | Pekín 2008

Boxeo en Cuba. Conocido como el deporte de los puños, se practicaba en la antigua Grecia, en los Juegos Olímpicos, desde los orígenes fue un deporte popular. En Roma, los contendientes usaban los cestus, protectores metálicos para las manos, tachonado de clavos con el que llegaban hasta a matar a los contendientes.

No se ha podido establecer con éxito la fecha exacta del surgimiento del boxeo en Cuba. El mismo está ligado – al igual que el béisbol – a la influencia cultural norteamericana en la Isla. Debido a lo barato de su práctica se celebraban combates de pugilato entre las clases más humildes del país, mientras que la práctica más organizada se circunscribía a los círculos aristocráticos de la nación, donde, además, se jugaba baloncesto y tenis, que necesitaban implementos sólo asequibles para los sectores pudientes de la población.

La era del boxeo con guantes

En 1867 se inauguró en Londres el centro polideportivo Lillie Bridge Grounds. Allí, por iniciativa de John Graham Chambers, estableció su sede el Amateur Athletic Club, organización que decidió ese año organizar los primeros campeonatos de boxeo amateur de la historia, estableciendo también por primera vez tres categorías según el peso de los púgiles: peso ligero, peso mediano y peso pesado. El torneo fue patrocinado por John Douglas, 9º Marqués de Queensberry, y utilizó un set de doce reglas que Chambers había escrito dos años antes, y que serían publicadas en ese momento con el nombre de reglas de Queensberry para el deporte del boxeo, o como son universalmente conocidas, Reglas de Queensberry.

Las Reglas de Queensberry originaron el boxeo moderno. Allí se estableció que los boxeadores debían usar guantes, que los rounds debían durar tres minutos con un minuto de descanso entre ellos, la cuenta de diez segundos al boxeador caído y la prohibición de tomar, empujar o abrazar al contrincante.

El primer púgil en ganar un título mundial según estas reglas fue el estadounidense Jim Corbett, que derrotó a John L. Sullivan en 1892 en el Club Atlético El Pelícano de Nueva Orleans, Estados Unidos. Con la aceptación gradual de las reglas del Marqués de Queensberry, surgieron dos ramas claramente diferenciadas del boxeo: el profesional y el aficionado. Cada una de ellas ha producido sus propios organismos reguladores locales, nacionales e internacionales, con sus propias variaciones de las reglas.

En los Juegos Olímpicos de San Luis 1904 (Estados Unidos) se incluyó al boxeo como deporte olímpico, estableciéndose siete categorías clásicas: peso pesado, peso mediopesado, peso wélter, peso ligero, peso pluma, peso gallo y peso mosca.